El dolor en las articulaciones surge de cualquier parte de una articulación, incluido el cartílago, el hueso, los ligamentos, los tendones o los músculos. No obstante, suele estar relacionado con artritis o artrosis, que es la inflamación o dolor en el interior de la articulación secundaria a una degeneración de los tejidos.

El dolor articular puede ser suave y causar molestias solo después de ciertas actividades, o puede ser intenso y limitar todos los movimientos del paciente al provocar un dolor intenso.

Una buena historia clínica y exploración física son claves para su diagnóstico.