Implantación de Sistemas de infusión espinal
Un sistema de infusión espinal es un dispositivo que administra cantidades concentradas de medicamentos mediante un pequeño catéter (tubo) en la zona de la médula espinal. De esta forma, la administración de fármacos cerca del lugar de acción deseado nos permite mejorar la eficacia y reducir las dosis que ya estaba tomando por vía oral, reduciendo a su vez los efectos secundarios.
El procedimiento se suele realizar en dos pasos: Primero se realiza una fase de prueba mediante la administración directa del fármaco a través de una aguja muy fina. Si el paciente experimenta una mejoría significativa del dolor y no experimenta efectos secundarios, pasa a ser candidato para implantar un dispositivo permanente en el que se coloca un catéter (tubo) en la médula espinal y se conecta a un dispositivo debajo de la piel que actúa de reservorio y dispensador automático del fármaco en cuestión, mejorando notablemente su calidad de vida.
Este procedimiento es ambulatorio y podrá irse a casa ese mismo día o permanecer una única noche ingresado/a. Posteriormente se precisa un reposo relativo durante los días posteriores.
Una vez familiarizado con el sistema, usted mismo sabrá si necesita más o menos dosis y así se lo hará saber al especialista de la Unidad del Dolor para regular la cantidad del fármaco. El dispositivo precisa de unas recargas de la medicación que pueden variar entre unas semanas y 6 meses, y que se realizan con un procedimiento sencillo bajo anestesia local.
Actualmente, los sistemas de infusión espinal se ofrecen a pacientes con un dolor crónico intenso que no responde a otros tratamientos.
Ejemplos:
- Dolor en espalda severo asociado o no a una cirugía de raquis previa
- Dolor oncológico
- Trastornos espásticos